No creo que vuelva a Venezuela por unos años. Tuve que pasar las alcabalas de la frontera con el mismo sentimiento de peligro con que los alemanes huían de Alemania Oriental. Me obligaron a presentar el pasaporte 3 veces y me revisaron concienzudamente el equipaje, las 3 veces. Me revisaron las fotos del teléfono. Traje dos teléfono y el que les dí para revisar no tenía fotos. El otro tampoco, pero ahí estaba la cuenta de @twitter. Total que tenía la adrenalina a millón. Pero palante. Gracias Venezuela por recibirme en tu seno. Quiero servirte hasta alcanzar la libertad.
No creo que vuelva a Venezuela por unos años. Tuve que pasar las alcabalas de la frontera con el mismo sentimiento de peligro con que los alemanes huían de Alemania Oriental. Me obligaron a presentar el pasaporte 3 veces y me revisaron concienzudamente el equipaje, las 3 veces. Me revisaron las fotos del teléfono. Traje dos teléfono y el que les dí para revisar no tenía fotos. El otro tampoco, pero ahí estaba la cuenta de @twitter. Total que tenía la adrenalina a millón. Pero palante. Gracias Venezuela por recibirme en tu seno. Quiero servirte hasta alcanzar la libertad.
@federicoalves Hubiese saludado aquí en mi tierra; Cúcuta. Abrazo.